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Creando escuela

lunes, 14 de diciembre de 2009


El cibersexo se considera una actividad solo apta para personas con un nivel de imaginación y agilidad mental bastante elevada. De no ser así, la monotonia y la simplicidad aparece con cierta rapidez en la charla. Eso quiere decir que no todos/as, ni mucho menos, sirven para esta actividad especial del sexo.
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Por lo general, los hombres son más propensos a llevar a cabo este tipo de experiencias que las mujeres. Eos no quiere decir que hayan hembras que les aficione el tema pero no es equiparable en número a los hombres.
Cuando nos encontramos en la oportunidad de llevar a cabo una experiencia cibersexual, debemos tener claro unos factores: *

- ¿Buscamos charla simple con connotaciones sexuales o fantasear con una situación concreta que tenemos en mente?
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- ¿Estamos preparados para tomar las riendas o preferimos que las lleven?
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- ¿Somos conscientes de que nada es lo que parece y que al otro lado puede haber alguien muy distinto a quien se describe?
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- ¿Asumimos de buena gana este handicap o no?



En este ultimo punto entramos en el gran meollo del tema del cibersexo. Es algo que algunos tienen muy presente y otros simplemente, no les preocupa con tal de llegar a un orgasmo. Particularmente, a mi me irrita. Me explicaré.
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La red esta plagada de afeminados que llevan una doble vida donde prefieren dar rienda suelta a su lado femenino por la red. Eso hace que, a mi juicio con muy mala hostia, se hagan pasar por mujeres y engañar a otros hombres heterosexuales que, sin saberlo, acaban por exhibir una espectacular corrida a otro como ellos.
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Personalmente, me produce asco tal situación y no voy a negar aquí que en mis tiempos de "ingenuidad del novato" he caido en la trampa en más de una ocasión.
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Sin embargo, existen algunas pistas que nos pueden poner en evidente alerta de que podamos encontrarnos ante un mariconeo de malas intenciones:


1) Una charla que invite a una resolución rápida. Es decir, que se vaya al grano. Pocas mujeres de verdad van tan directas en el campo del cibersexo. Ellas necesitan que el otro participante se curre el estilo que pocas veces de entrada ha de ser directo. Asi que una señal de rapidez en la actividad del dialogo sexual, es motivo de alerta. *


2) Se puede no tener cam. Es decir, la "mujer" puede no tener realmente cam, pero a cambio ofrece fotografias con cierta facilidad. (En otra ponencia hablaremos del "cornudismo"). Lo más probable es que no sean fotos de ella, sino de cualquier web porno de internet.
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3) Nos pide, en cambio, a nosotros cam para ver "nuestra herramienta". Tal vez sea la alerta más creible que podemos tener en cuenta. No pinta bien. Desconfiemos casi al 100% Casi con toda seguridad estamos en presencia de un pajillero gay (Y cuando digo pajillero gay con tono despectivo, lo hago porque engaña, porque usa tretas sucias para conseguir su meta y eso no me gusta)
Qué consejos se pueden dar:

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Son pocos. Pero tal vez el que más debemos tener en cuenta, puede que sea el que más puertas nos cierre en esta modalidad del sexo on line. Personalmente, la he adoptado desde hace pocos años y rara vez me salto la norma. El consejo es que, simplemente, pidamos "una prueba de vida" es decir, unas imagenes de cam de pocos segundos, los suficientes para que podamos verificar que estamos en ciberpresencia de una mujer y no de un puto afeminado con malas intenciones. Obviamente, debemos aplicar esta alternativa si estamos en presencia de alguien que tiene cam (aunque puede tenerla pero en modalidad oculta para que pensemos que no tiene) si no es el caso, lo demás lo dejo a eleccion de vuestro instinto y que tengais claro que, lo peor que puede pasar es que pongais cachondo a un hombre pensando que es una mujer cañon.


Si la mujer pone pegas a esa "prueba de vida", debemos respetarlo, claro esta. Igual ella nos pide a cambio vernos a nosotros. De hecho es legítimo pero ahí ya entra nuestra actitud o rol en el juego del cibersexo porque, por ejemplo en mi caso, que es un rol de dominación, no recibo ordenes de ninguna mujer, asi que siempre dejo claro de antemano, que el que yo pida unos segundos de cam, no implica que debe corresponder. Eso es, en todo caso decisión puntual mía. Vosotros podeis decidir lo que os de la gana. Dependerá de lo desesperado que cada uno esté.
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Dedico esta ponencia especialmente al Vampiro Blanco Arturo.

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